Máximo

Blog No.3

" Cuando muere un perro, pierdes un amigo pero ganas un angel".             Anónimo

   Era un día nevado del mes de febrero, cuando muy temprano por la mañana empezamos nuestro viaje de 4 horas a la ciudad de Howey, Indiana, para encontrarnos con la que sería nuestra primera mascota. Una granja a las afueras de esta ciudad era la que criaba perros Golden Retreiver. Los perros de esta raza se caracterizan por ser perros grandes y fuertes. Siempre muy alegres, amigables, leales, obedientes y muy inteligentes, lo que los hace fáciles de entrenar y perfectos para una familia con niños.

        Nunca olvidaré la emoción que todos nosostros sentiamos camino a la granja. En los últimos días nos preparamos con todo lo necesario para recibir a nuestro nuevo "bebé". Un cachorrito de 6 semanas necesitaría, una jaula,  una camita, comida, juguetes,  pero sobre todo mucho amor y paciencia. También necesitaría un nombre, pero para eso decidimos esperar hasta conocerlo.

Cuando por fín llegamos a la granja, nos recibieron 2 perros Golden Retreiver que jugaban afuera de la casa, recuerdo que todos notamos lo grande que estaban esos perros, pero nunca se nos ocurrioó pensar que compartían los mismos genes con la que sería nuestra nueva mascota, y que por consecuencia , el crecería también tan grande como estos adorables anfitriones.

Y asi fué, conforme pasaba el tiempo  MAXIMO ( con ese nombre fué bautizado), creció, creció y creció, tanto que haciendole honor a su nombre llego a pesar hasta 125 libras. Su pelo era de color dorado, muy suave y largo. Tenía un carácter alegre, era muy jugueton y amigable. A su vez podría casi jurar que tenía un cierto sentido del humor. Máximo también era un experto psicólogo, aficionado al estudio de la personalidad de todos los que le rodeaban, tanto que llegó a conocernos perfectamente a cada uno de nosotros, y hasta podría asegurar que para más de dos aquí en la casa se convirtió en un terapeuta personal.

     Pero como todo cachorrito, Máximo era  también muy, pero muy travierso, buscaba cualquier oportunidad para escaparse de la casa e ir a visitar a los vecinos, tenía suerte de que a todos les caía bien, era un perro popular: Gracias a  él conocimos a mucha gente. Curiosamente ahora que lo pienso , núnca nos cansamos de sus travesuras, al contrario, para nosotros eran divertidas.

     Haciendo también honor a su nombre, todo lo que hacía lo hacía al máximo, si era  comer, comía hasta más no poder. Si se trataba de correr , el corría como si no fuera a tener en su vida otra oportunidad de volver a hacerlo. También amaba el agua, tanto que cuando lo llevavamos a la playa le encantaba meterse al mar y jugar con las olas por horas, era muy difícil sacarlo del agua al final de día. Seguido veíamos gente tomandole video con sus teléfonos, era todo un show el que él ponia. Tenemos muchas anécdotas de él, el 99% de ellas  muy divertídas y llenas de vida, pero el 1% restante es una anecdota triste que nos tomo a todos por sorpresa.

      Habían pasado solo 3 años desde aquel día nevado del mes de febrero en el que Dios nos puso a Máximo en nuestro camino o mejor dicho en el que Dios nos puso a nosotros en el camino de Máximo,  cuando un sábado de verano mientras estabamos todos en la cocina preparando todo para una carne asada  (las favoritas de él),  lo escuchamos acercarse corriendo a nosotros, a todos nos llamo la atención la forma en la que él llegó, se notaba agitado y como si quisiera decirnos algo, volteo a vernos a todos , y en ese momento....... se desmayo!  Creo que esta por demás decir el susto que nos dió y como inmediatamente todos tratamos de hacerlo volver en sí, le tomo unos minutos recuperar el conociemiento y volver a ponerse de pié. En seguida tomo agua, y al muy estilo de él, pedia salir de la casa, como si quisiera tomar aire, así que mi esposo decidió seguirle el juego para así también observarlo un poco más. Mientras, nosotros tratabamos de decifrar que fué lo que pudo haberlo puesto  así, pensamos que quizás fue la caminata de la mañana, a pesar de que había sido temprano  ya se sentía el calor y quizás estaba insolado? No habían pasado ni 10 minutos cuando mi esposo me llamó por telefono para decirme que  Máximo se había desmayado una vez más y que lo iba a llevar al veterinario.

     El diagnostico fue cáncer en el hígado y le daban solo 6 meses de vida. El veterinario nos explico que el cáncer ya estaba muy avanzado y quimioterapia no era una opción. Dijo que a diferencia de los humanos , los animales  solo pueden recibir cantidades muy pequeñas de quimioterapia y que  en este caso no sería muy efectiva en el sentido de que en realidad no lo iba a curar. El sugirió un tratamiento con esteroides que lo mantendría sin dolor por los próximos 6 meses. Pero Máximo solo vivio ..... 10 días más.

      Como se le dice adiós a un amigo? A el que en estos cortos 3 años se convirtió en una parte importantísima de nuestra familia. Para mi esposo y para mí fue como un hijo más,  para mis hijos como un hermano, un compañero de juegos, de tareas, de caminatas. Un fiel e incansable vigilante de noche y de día, y como lo dije antes hasta un terapeuta personal.

      Ya pasaron 10 años de su partida y todavía esta él presente en todos nosotros ,  siempre con mucho cariño y a veces hasta con carcajadas al recordar sus travesuras, pero  algunas veces también con tristeza sin todavía poder entender como es que se fué tan pronto. Pues así como vivió su vida de una forma acelerada, así también rápido y sorpresivamente se fue. Siempre he pensado que de alguna manera él sabia su destino y por eso vivió  " la vida loca"  por así decirlo. Como tratando siempre de ganarle tiempo al tiempo.

  Como dicen por ahí sorpresas te da la vida, núnca imaginamos las huellas que ese angelito de 4 patas dejaria marcadas en nuestro corazón por el resto de nuestros días, pues a pesar de que ya pasaron 10 años hoy al escribir esta historia no pude evitar que mis ojos se llenaran de lágrimas más de una vez. Máximo fué una lección de vida constante de como el presente es un regalo de Dios y de como es de incierto el mañana. Y que por esta misma razón lo mejor es vivir la vida al MAXIMO.


Rosalba Qumsieh........ mamá de Máximo Qumsieh





                                                                          Máximo a la edad de 3 meses.

                  Le encantaba jugar con todos los niños y sentirse parte del grupo. No le gustaban las injusticias y que no lo incluyeran en los juegos era lo peor que le podian hacerle a el.

                                                                        Su última foto  con sus hermanos.

   Puppy prints on love heart background  by Starline   

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